Interpretar los sentimientos

Desde los orígenes de la fotografía encontramos el desnudo artístico como muestra para exponer la belleza del cuerpo humano, pero, sobre todo, para transmitir sentimientos abstractos y universos personales. Dedicada a la publicidad desde hace años, María José Cañete Muñoz (30) empezó a experimentar el arte a través del teatro y la música, pero fue una experiencia personal dolorosa la que impulsó en ella ese deseo de mostrar el dolor a través de la fotografía.

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Bajo la lente de retratistas amateur y profesionales, Marijo Kalixien –nombre artístico que adoptó– se dedica al arte nudista desde hace ocho años, y es directora artística de esas imágenes en las que muestra expresiones y sentimientos propios del ser humano.

Ella nos relata sobre cómo nace su interés en este arte, sobre sus trabajos y lo que la inspira, y nos cuenta además sobre su próxima exposición, denominada 13 casas y un desnudo para sí misma, a realizarse en el Centro Cultural La Serafina, el viernes 19 de julio, a las 21:00.

¿En qué se basa tu trabajo? Soy la primera nudista que es directora artística de sus fotos; es decir, manejo los conceptos que voy a desempeñar en las fotos por medio de experiencias personales e inquietudes como miedo, dolor, rabia, afecto, ternura y erotismo. El interés nació aproximadamente por el 2011, bajo la necesidad de superar una tristeza y querer congelar ese momento como medio curativo. La belleza melancólica y tímida; relatar a través de la piel. Siempre digo que nací en tiempos robados, cuando el trabajo como publicista, ilustradora y músico abarcaban todo mi tiempo. También ejercí el teatro y la poesía. Mis trabajos se proyectan en la autoexploración femenina del cuerpo a través de la mirada artística que se da especialmente en la fotografía. La búsqueda de sí misma rompiendo el límite del miedo.

¿Todas tus obras ensalzan el cuerpo femenino? Todas ensalzan lo espiritual así como una denuncia a través de la desnudez. Cada obra, además de lo visual, es poesía, música y performance u otro arte que describa esa estigmatización del nudismo. Cantar la piel como método de exorcizar el alma, poder reinterpretar y expresar un sentimiento que permita sobrepasar una barrera emocional, para romper el esquema de la vergüenza, la inseguridad, la sexualización del cuerpo.

¿Qué implica una obra visual? Las fotografías que me toman se basan en mis sentimientos elevados y bajos. En mi hogar y confort materno. En mis experiencias personales y artísticas. En la urgencia de declarar un mensaje que pueda evocar que soy de carne y no un robot automatizado por la vida acelerada que nos exige el día a día como sociedad; una manera de civilización forzada. Son obras que reafirman que estoy viva y mañana puedo morir.

¿Existe una fuente de inspiración? Me inspiran muchas cosas.

La muerte, porque un día toda la piel solo es ceniza, y la vida, porque florecemos en cada metamorfosis que sucede en nuestros cuerpos. Además, la figura femenina es como un lienzo en el que se escribe; el contacto físico como el ojo. Me inspira además la valentía de algunas mujeres, a pesar de que se muestran al mundo sensibles y vulnerables. El fin es provocar el espíritu, el estudio de la mirada interior del inconsciente sacada para afuera, usar el cuerpo expuesto de manera bidimensional y poética desde una manera feminista, y a través de sus autorretratos desnudos mostrar rabia, dolor y alegría, haciéndolo para ellas mismas y no solo para el ojo del perfecto canon de belleza. En cuanto a figuras que me inspiran puedo nombrar a Suzanne Valadon (pintora y modelo para pintores), Frida Khalo (pintora), Emanuela Cau y Natasha Andrastea (fotógrafas contemporáneas).

¿En nuestro país todavía existe un excesivo tabú con todo lo relacionado a la forma de ver nuestros cuerpos? Creo que poco a poco vamos sacando el tabú. Hoy, muchas mujeres empiezan a tener más espacios propios en los que pueden declararse de manera poética y autodidacta. Sin embargo, todavía existe el prejuicio sobre la exposición completa del cuerpo.

¿Se puede afirmar que el arte es una forma de lograr esa reconexión con el cuerpo? Sí, somos de carne y hueso, y sentimos hasta un abrazo como un medio expresivo que el arte describe. Es la razón por la que quiero, a través de mis fotos, expresar la piel desnuda, así como nacimos, virgos y puros, porque no hay nada más frágil que la desnudez. Describe una sensación de vulnerabilidad, sin epidermis, por así decirlo. Mi propósito no es provocar, sino declarar un sentimiento.

¿Cómo se logra transmitir ese sentimiento? No todas las mujeres logran identificar y conocer sus sentimientos y experiencias lo suficientemente bien como para expresarlos. Es la razón por la que deseo ayudar a las mujeres a conocerse y motivarlas a expresar la visión única de sus experiencias, por lo que además de ser la modelo de mis fotos, intentó cautivar la atención de otras mujeres para que expresen también, a través de la fotografía, sus sentimientos más ocultos. Es importante usar todo el arte para crear consciencia y conversación en torno a esas fotos de autodescubrimiento y expresión; poder reinterpretar y expresar un sentimiento que les permita sobrepasar una barrera emocional. Siempre hay mujeres que se atreven a romper el esquema de la vergüenza, la inseguridad, la sexualización del cuerpo.

Tenés una exposición en miras. ¿De qué se trata? La exposición, denominada 13 casas y un desnudo para sí misma, será el viernes 19 de julio, a las 21:00, en el Centro Cultural La Serafina. Estas obras, imágenes tomadas por los fotógrafos Gabriel Díaz, Deisy Esquivel, Diana Recalde, Ann Alcaraz, entre otros, tratan de la mujer que se busca a sí misma a través del espejo dentro de la intimidad de su hogar. Busca comprender su cuerpo en distintos ojos.

¿Qué tipo de fotografías se podrán apreciar durante el evento? Mi interés no es comercial, por lo que algunas fotos son muy sencillas, mientras que otras muestran un ojo sumamente profesional a la hora de tomar fotografías. Se trata de un evento con variación de matices, con el único objetivo de curar el alma. En resumen, se podrán apreciar fotos, así como otros medios artísticos, que denuncien sobre la piel como medio de expresión.

¿En el Paraguay existen otros profesionales del arte enfocados en esta área? No conozco otras artistas nudistas en nuestro país, pero en el área de la fotografía se puede nombrar a Ann Alcaraz, Camila Morínigo y Nath Planás. Nos enfocamos en darles voz a nuestros cuerpos e invitamos a que te aceptes sin prototipo ni etiquetas. La belleza va más allá de nuestra propia máscara.

¿Cuál es el siguiente paso o meta como profesional? Tengo como meta dar talleres acerca de todos los medios artísticos en los que se pueda autoexplorar una mujer, siempre reconociéndose en su búsqueda de valentía.

Con el objetivo de compartir e inspirar a otras mujeres a que sanen a través del desnudo y el descubrimiento de su propio cuerpo como herramienta de sanación, asegura que seguirá trabajando para inspirar.

Marijo Kalixien

Diseñadora e ilustradora por el Instituto Superior de Bellas Artes, se dedica al arte de desnudos poéticos como medio para inspirar a las mujeres a la autoaceptación. Sus trabajos, enfocados en los sentimientos abstractos y personales, serán expuestos en el Centro Cultural La Serafina.

Desnudo artístico

Según la historia, la evolución del desnudo artístico transcurre en paralelo a la historia del arte en general y, a lo largo del tiempo, ha sido representado a través de diversos medios, como la pintura, escultura, cine y fotografía.

Aunque se suele asociar al erotismo, el desnudo artístico tiene diversas interpretaciones y significados, desde la mitología hasta la religión o como representación de la belleza humana, siendo, por tanto, considerado como una de las clasificaciones académicas de las obras de arte.

nadia.cano@abc.com.py

Fotos Celso Ríos, gentileza

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